El optimismo, aspecto clave evaluado en el Cuestionario Socioemocional del DIA, podría ser una prioridad para el trabajo de su escuela si los resultados muestran que se encuentra muy descendido, es decir, con un alto porcentaje de respuestas no favorables según el Informe Socioemocional del Curso o del Establecimiento.
Se propone que al interior de la comunidad educativa se comprenda lo mismo al hablar de optimismo y que se analicen los resultados obtenidos en el DIA, con lo cual se podrá definir si este será uno de sus focos de trabajo durante el año.
A continuación, se entregan ideas y propuestas para que las comunidades puedan reflexionar sobre el optimismo y definir una línea para su trabajo y fortalecimiento. Dichas propuestas están pensadas para llevarse a cabo de forma sistémica, sin embargo, los docentes, de manera autónoma, también pueden poner un foco socioemocional personal en su trabajo en la sala de clases.
Algunas prácticas que los y las docentes pueden implementar para fomentar el optimismo en sus estudiantes y que, en términos personales, pueden adoptar para fortalecer su propia mirada optimista, son:
- Reconocer el propio estilo explicativo predominante (optimista/pesimista):
- Ser un modelo de estilo explicativo optimista sería la mejor manera de influir en el estilo de sus estudiantes. En este sentido, el primer paso es identificar el estilo propio. Lo más efectivo en este caso es descubrir el estilo explicativo personal conversando con otros. También es posible mirar en sí mismos(as) qué predomina más, o bien recordar un problema complejo en que uno se haya visto involucrado(a) en el último tiempo. Algunas preguntas para la autorreflexión:
- ¿Cuál fue la tendencia explicativa personal predominante?
- ¿Creo que tiendo a fijarme más en lo que puedo resolver o en lo que no puedo?
- ¿Tiendo a evaluar que en mi vida hay demasiadas cosas que no puedo controlar?
- Las personas que nos rodean en general viven en condiciones y contextos parecidos a los nuestros. Pienso en alguna de estas personas que pareciera tener más control sobre su entorno que yo: ¿Qué hace que se vea más optimista? ¿La puedo visualizar e identificar qué puedo aprender de su estilo explicativo?
- Ser un modelo de estilo explicativo optimista sería la mejor manera de influir en el estilo de sus estudiantes. En este sentido, el primer paso es identificar el estilo propio. Lo más efectivo en este caso es descubrir el estilo explicativo personal conversando con otros. También es posible mirar en sí mismos(as) qué predomina más, o bien recordar un problema complejo en que uno se haya visto involucrado(a) en el último tiempo. Algunas preguntas para la autorreflexión:
- Profundizar en el valor de tener un estilo explicativo optimista para explicitarlo:
- En esta ficha se desarrolla el tema referido a cómo un estilo explicativo optimista es una fuente de fortaleza, ya que ante una situación adversa invita a reconocer lo que es manejable por la propia persona. Es posible profundizar en la comprensión del optimismo a través de variadas fuentes y autores. Por ejemplo, el texto de María del Rosario Richards (2022), Optimismo y Resiliencia en Adolescentes (detalles en las referencias; el texto es de libre circulación), desarrolla el tema del optimismo y cómo se relaciona con la capacidad de los adolescentes de superar situaciones adversas, esto es, la resiliencia.
- Ser positivo(a) y alentador(a):
- Esto corresponde a la heterorregulación emocional, es decir, a la manera como gestionamos la expresión de los estados internos, emociones, recursos y valores de manera colectiva. En contextos escolares, la heterorregulación se refiere a la intervención de otro (cuidador, docente, padre, madre o apoderado) en la regulación de las emociones de las y los estudiantes.
- Tener un estilo explicativo optimista es algo que se puede aprender o desarrollar, para lo cual la comprensión de sí mismo(a) y del valor del optimismo son importantes, pero también la comprensión de los demás. Al igual que en el desarrollo de la autoestima, los demás influyen en cómo se construye la comprensión propia de lo que puedo o no hacer y en la elección de dónde y ante cuáles desafíos desplegar el máximo de mis recursos.
- Podemos ayudar a nuestros pares y estudiantes a incorporar cada vez mejores maneras de evaluar las situaciones, mostrando lo que sí se puede cambiar, identificando el problema y también mirando los recursos, opciones o posibilidades con que se cuenta para la solución de un problema.
Analiza las trayectorias académicas y socioemocionales de todos los años del DIA con Kimche
Fuente: ¿Qué es el Optimismo y cómo podemos promoverlo entre las y los estudiantes?, Agencia de Calidad de la Educación.
